Idealistas
Hace mucho tiempo, más de lo que quisiera, me encontraba conversando con amigos sobre la oportunidad de participar en las elecciones generales de aquél entonces, cuando recién pasaba los 18 años. Hablábamos sobre la importancia de votar y el deber patriótico que significa, quizás influenciados por la historia reciente, en la que eran frecuentes las administraciones militares. Eran momentos en los que la conciencia del poder de la sociedad civil, convertido en voto, era especialmente valorado y, quizás por ello, la juventud parecía muy motivada a participar. Con el paso de los años y con el devenir de los acontecimientos políticos, la desilusión ha encontrado su espacio y ha ido ganando adeptos. No es mera percepción. En 2024, el estudio Latinobarómetro “La Democracia Resiliente” ya nos brindaba información valiosa sobre el desencanto con la democracia. En Honduras, el 43% de […]